miércoles, 22 de marzo de 2017

Las y los feministas exhiben en su fuerza en Madrid con una marcha multitudinaria

La manifestación del Día Internacional de la Mujer en la capital fue uno de esos éxitos que desbordan las previsiones, entre ellas la de cortar el tráfico a tiempo y en más carriles en la calle de Alcalá, entre Cibeles y Gran Vía, donde se produjo un gran atasco en el que inevitablemente se mezclaron manifestantes y vehículos. A las siete de la tarde, hora de inicio de la marcha, en la calle de Alcalá estaban cortados al tráfico solo los carriles en dirección a Gran Vía, pero la afluencia de feministas era tanta que se situaron también en los carriles del otro sentido de la circulación. El punto de partida era Cibeles; el de llegada, la plaza de España, pero a las siete y media la muchedumbre apenas se movía. Había una gran masa de congregados no solo detrás de la pancarta de cabecera que estaba en Cibeles, sino también por delante, hasta la confluencia con Gran Vía, incluso más allá. Cerca de las ocho, un pequeño camión con el equipo de sonido logró abrirse paso para que tras él avanzasen las convocantes y pudiesen ponerse al frente de la marcha y, así,  mostrar en primera línea su pancarta “Juntas y fuertes, feministas siempre. Paro Internacional contra el heteropatriarcado. Movimiento Feminista de Madrid”.
Mientras en las alturas vigilaba un helicóptero y en los carriles del atasco los autobuses daban marcha atrás para escapar por las calles adyacentes, los presentes aprovechaban para tomar imágenes del ritual. La fuente de la diosa Cibeles y la fachada del Ayuntamiento se iluminaban de violeta, el color simbólico del feminismo, que mujeres y hombres también lucían en su indumentaria. Muchas y muchos participantes llevaban un brazalete de tela morada. Un señor mayor llevaba la tira de tela morada sobre su americana, como una elegante banda. También se vieron esos gorritos fucsias utilizados en las protestas feministas estadounidenses contra Donald Trump. Las y los jóvenes de los colectivos antifascistas acudieron con su singular parafernalia: rostro embozado —una minoría—, ropa oscura, banderas negras.
Jornada de lucha con ambiente festivo
Por las redes sociales las feministas han insistido en que el 8 de marzo no es una fiesta, no se celebra sino que se conmemora, puesto que es una jornada de lucha; por eso algunas de ellas  han divulgado el lema “No me felicites, lucha conmigo”. La marcha de Madrid fue claramente reivindicativa aunque desarrollada en un ambiente festivo. Durante el recorrido se vieron varios grupos con tambores y en la parte trasera de la marcha se situó una gran batucada. Por todas partes el bullicio era incesante y se oían cánticos, gritos, pitidos y aplausos. La multitud tenía necesidad de expresarse, lo mismo a voces que en sus letreros. Había pancartas de todo tipo: las grandes y formales de los partidos políticos de izquierda, los sindicatos y los movimientos sociales; y las más caseras hechas con sábanas, cartones o cualquier otro soporte cotidiano sobre el que los grupos pequeños y los particulares plasmaron los mensajes más creativos y originales, los había incluso para la reflexión y la autocrítica.
En la estación de Cercanías de Recoletos los grupos llegados desde Coslada y Alcobendas se hacían notar a voz en grito. Y es que eran muchas las pancartas que mostraban el nombre de las asociaciones que llegaban a Cibeles desde los barrios de la capital y las localidades de la comunidad autónoma, por ejemplo: Asociación de Mujeres de Carabanchel Alto, Chamberí Feminista, Colectivo Feminista de Fuenlabrada. Entre las formaciones políticas mostraron sus símbolos Equo, Izquierda Unida y Podemos. Entre los sindicatos: CGT, Solidaridad Obrera, CC OO y UGT. Los colectivos de la sociedad civil eran de lo más diverso y de todas las edades, a saber: Europa Laica, Colectivo Artemisa, Autodefensa Feminista, Asamblea Feminista, Asociación de Chilenos en España, Bloque Juvenil Feminismo No Mixto, Coordinadora de la Vivienda de Madrid, Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), Coordinadora de Pensionistas en Defensa del Sistema Público de Pensiones, Coca-Cola en Lucha, Pan y Rosas, Colectivos de Jóvenes Comunistas (CJC), Acción en Red, Transparentes Mujeres Mayores, Jóvenes en Pie, Anticapitalistas, Ecologistas en Acción, Amnistía Internacional, Asamblea Transmaricabollo, Biblioteca de Mujeres, COGAM, Brujas Migrantes, Arqueólogas Feministas.
A las nueve y media muchas y muchos asistentes ya se habían aproximado a la plaza de España. En la confluencia de ésta con la Gran Vía estaba colocado el escenario donde se leyó el manifiesto y se invitó a la concurrencia a bailar el Merengue Feminista. Desde el mismo escenario se agradeció la participación masiva y se dio por finalizada la manifestación. Sin embargo, faltaba por llegar al punto de destino un enorme grupo de manifestantes que continuaba completando el trayecto al ritmo que marcaba la gran batucada. Entre estos rezagados había juventudes de algunos partidos políticos y más de una veintena de colectivos como los ecologistas, migrantes, pro derechos humanos y LGTBI.
Los mensajes de la multitud
Como era de prever, tras el aumento de la frecuencia de asesinatos machistas en los últimos meses y la realización de una huelga de hambre en la Puerta del Sol por mujeres de la asociación Velaluz desde el 9 de febrero, el tema de la violencia contra la mujer aparecía en gran número de proclamas escritas y orales. Sin embargo, tendría una idea equivocada de la protesta quien piense que fue el asunto central. La marcha madrileña resultó ser una movilización feminista en sentido amplio. Se apeló a la igualdad,  la justicia y la libertad; a temas laborales, a la educación y a la cultura; y se recalcó algo esencial en todo movimiento social: la fuerza que proporciona la unidad. La lucha feminista continúa con viejos y nuevos desafíos.
La fuerza de las mujeres unidas
Ya en la pancarta de cabecera se observa la idea de que la unidad es la fuerza de la lucha de las mujeres, pues dice “Juntas y fuertes, feministas siempre”. Igualmente se puede ver en el propio manifiesto de la convocatoria que comienza así: “Este 8 de marzo de 2017 traemos más fuerza que nunca porque somos muchas”. La unidad de la que habla el texto traspasa fronteras y queda simbolizada en el “Paro Internacional contra el Heteropatriarcado”, llevado a cabo a mediodía a las puertas de diversos centros e instituciones. El manifiesto hace mención de las protestas protagonizadas recientemente por feministas en Argentina, Estados Unidos y Polonia, así como de la situación de las mujeres en Rusia, Honduras y el Sahara Occidental. Expresamente se dice “Porque su lucha es nuestra lucha, porque estamos todas juntas”; y repite la idea: “Nos aliamos para ser más fuertes”.
Que la unidad da fuerza a las mujeres es una idea que estaba presente a lo largo de toda la marcha en muchas pancartas (P) y frases voceadas (V). Ejemplos:
“Nos quieren solas, respondemos unidas. Bloque Juvenil Feminismo No Mixto”. (P)
“Las jóvenes tenemos un mundo que ganar. Unidas y Organizadas. CJC”. (P)
“Mujeres del mundo unidas”. (P)
“Juntas haremos temblar la tierra”. (P)
“Contra las agresiones machistas, en el antifascismo, unidad y sororidad”. (P)
“Tranquila hermana, aquí está la manada. Colectivo Feminista de Fuenlabrada”. (P)
“Si nos tocan a una, nos tocan a todas. Coordinadora de la Vivienda de Madrid”. (P)
“Si nos tocan a una, nos tocan a todas. Brujas Migrantes”. (P)
“No estás sola, nos tienes a todas”. (V)
“Las mujeres unidas jamás serán vencidas". (V)
Reacción a la sumisión: la mujer combativa
Una pancarta decía “Floreros: Sofía, Cristina, Botella, Mato etc.” Frente a las mujeres sumisas, los mensajes ensalzaban a las mujeres combativas. Frases:
“Nos quieren resignadas, nos tienen en pie. Jóvenes en pie”. (P)
“Mi cuerpo, mi vida, mi forma de follar no se arrodillan ante el sistema patriarcal”. (V)
“Nos quieren sumisas, nos tienen combativas”. (V)
“Que no (3) tenemos miedo”. (V)
El orgullo de la lucha feminista
“Mi mamá me enseñó a luchar”. (P)
“Respeta mi existencia o tendrás resistencia”. (P)
“Es el tiempo de nuestra revolución”. (P)
“Poder para las  hermanas y así a la clase”. (P)
“Somos mujeres empoderadas. Con nosotras no se puede. EMMA 8M”. (P)
“La lucha será feminista o no será”. (V)
“¡Que viva la lucha de las mujeres!” (V)
“Madrid será la tumba del machismo”. (V)
“¡Aquí estamos las feministas!” (V)
“Somos feministas, no feminazis”. (V)
“Todos los días son ocho de marzo”. (V)
Contra las violencias machistas
En este asunto se sigue haciendo mucho hincapié en el lenguaje, se insiste en denominar al machista que mata “asesino”. Veamos:
“No son hombres, son asesinos”. (V)
“No son muertas, son asesinadas”. (V)
“No son muertes, son asesinatos”. (V)
“Disculpen las molestias, nos están asesinando”. (V)
“Somos el grito de las que ya no tienen voz”. (V)
“Ni una menos. Vivas nos queremos”. (V)
“Ni una menos”. (Escrito sobre un espejo portado por un joven)
“Hay otro maltrato en medios y despachos”. (V)
“Contra el patriarcado y su violencia, ahora y siempre, autodefensa”. (V)
“No estamos todas, faltan las asesinadas”. (V)
“No estamos todas, faltan las refugiadas. Asamblea Feminista”. (P)
“El miedo de la mujer a la violencia del hombre es el espejo del miedo del hombre a la mujer sin miedo”. (P)
Con el colectivo trans
Los colectivos LGTBI participan habitualmente en las protestas feministas con sus banderas arcoíris y sus pancartas. Este año, después de la reciente polémica suscitada por el autobús presuntamente transfóbo de Hazte Oír, los grupos trans se reafirmaron en la marcha con frases como estas:
“Mis genitales no definen quién soy”. (P)
“Transmisoginia también es patriarcado”. (P)
El cuerpo de la mujer pertenece a la mujer y ella decide
“Ni la Tierra ni las mujeres somos territorio de conquista”. (P)
“La Tierra no es vuestra; nuestros cuerpos, tampoco. Ecologistas en Acción”. (P)
“Contra la violencia machista. Por el derecho a decidir de las mujeres. Por un Estado laico. Por la igualdad y la libertad en conciencia. Europa Laica." (P)
“En mi coño mando yo”. (P)
Don’t worry, be gordi”. (Camiseta)
 “No a los vientres de alquiler, no a la explotación de la mujer”. (P)
“No a la mutilación genital femenina”. (Mensaje grabado difundido a través de un equipo de sonido).
Igualdad, libertad y justicia
“Nos ha salido feminista. No, os he salido de la jaula”. (P)
“Justicia a las mujeres”. (P)
“¿Qué queremos? Igualdad ¿Cuándo la queremos?” Ya. (V)
“La libertad de las mujeres depende de ellas mismas”. (P)
“Paramos por igualdad, libertad y solidaridad. Acción en Red. (P)
“Quiero ser libre, no valiente”. (V)
“La calle y la noche también son nuestras”. (V)
“La mujer no decide, la sociedad no respeta, la Iglesia interviene y yo estoy hasta el coño”. (P)
Empleo
“Maltrato laboral, no”. (P)
“Maltrato salarial, no”. (P)
“Igual trabajo, igual salario”. (P y V)
“Las mujeres trabajadoras, libres y luchadoras. Coca-Cola Casbega”. (P)
“La mujer trabajadora no bebe Coca-Cola” (V)
Educación, cultura, deporte
 “El feminismo ha de comenzar en las aulas”. (P)
“Crea machistas…y estás lista!” (P)
“Machismo, ni en el deporte ni en ningún lado. Hazle KO al patriarcado”. (P)
“No somos princesas ni queremos ser salvadas”. (V)
 “Salvar estudios feministas. UCM”. (P)
“Borrarnos de la Historia también es violencia”. (V)
“La Historia está sesgada, la Historia es patriarcal”. (V)
“Biblioteca de Mujeres. Un espacio propio”. (P)

Reivindicaciones
En el manifiesto se formulan varias exigencias que, resumidas son:
·        Cambio de modelo político, donde no se cuestionen los derechos de las mujeres. Hay que cambiar los valores que las invisibilizan y poner fin “no solo a la violencia física, verbal y psicológica, sino también a su desencadenante: la violencia simbólica”.
·        Respeto a la diversidad de género y sexual. “No toleramos la pasividad frente a las agresiones lesbófobas, tránsfobas y homófobas”.
·        Garantías para la acogida de “todas las personas que deseen migrar, porque la movilidad es un derecho”.
·        Protección para todas las víctimas de trata, así como “espacios seguros, derecho de asilo y alternativas reales de vida”.
·        Solución para los Centros de Menores. “¡Libertad para Higui por defenderse de los abusadores!”
·        “Educación laica, pública y gratuita”. Visibilidad del papel de las mujeres en todas las disciplinas.
·        “Educación afectiva y sexual libre de estereotipos patriarcales y normativos”.
·        Libertad de mujeres y trans sobre sus “derechos sexuales y reproductivos”. (Se oponen a que se recorte el derecho a decidir sobre el aborto a las jóvenes entre 16 y 18 años).
·        Erradicación de “la división sexual del trabajo, que nos condena a empleos precarios, peor pagados, no remunerados, ilegales e invisibles”.
·        “Socialización de los cuidados” y “recursos públicos y comunitarios que hagan posible la sostenibilidad de la vida”. (Oposición a los recortes).
·        Medios de comunicación “que respeten nuestra diversidad y nuestros cuerpos, que no nos cosifiquen ni instrumentalicen”.
·        Políticas feministas, no una “política ‘feminizada’ por el heteropatriarcado”.

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jueves, 26 de enero de 2017

Los manifestantes denuncian la pobreza energética como resultado del crimen

El 18 de enero de 2017, en plena ola de frío, los medios de comunicación anunciaron que las compañías eléctricas subirían el precio de la luz avanzada la tarde, lo que provocó el enfado de los ciudadanos que se lanzaron a expresarlo en las redes sociales. Por Twitter, en señal de protesta, se propuso un apagón en los hogares de veinte minutos a partir de las 19 horas, bajo las etiquetas #ApagaLaLuz  y #18EApagón19h. Algunos tuiteros coincidieron en señalar que con el apagón no se conseguiría nada y que hacía falta una gran movilización en la calle. Lo cierto es que tan solo un mes antes, el 21 de diciembre de 2016, con motivo de la campaña No Más Cortes de Luz, se realizaron manifestaciones y concentraciones contra la pobreza energética  en varias ciudades de todo el Estado. La protesta de Madrid comenzó a las seis y media de la tarde en Cibeles, transcurrió por la calle de Alcalá y terminó en la Puerta del Sol donde, como es costumbre, se hallaba el escenario para los discursos finales y la lectura del manifiesto. El lenguaje moderado y cuidadoso de los oradores que intervinieron sobre el escenario y el de la redacción del manifiesto contrastaba con los mensajes descarnados y acusadores de las pequeñas pancartas y de las consignas voceadas. Esto es, el anonimato de las pancartas sin firmar y de la muchedumbre gritando propició un lenguaje atrevido, crudo con el que se acusó sin tapujos  a las grandes compañías eléctricas  y se redefinió la pobreza energética como resultado del crimen.
El recibo es un “atraco”, las muertes son “asesinatos”
Algunas pancartas mencionaban  el problema de las puertas giratorias, por ejemplo esta: “Exministros enchufados en eléctricas”. Sin embargo, la pobreza energética en los mensajes de la protesta aparecía relacionada principalmente con el “robo” o “atraco” y los “asesinatos”. El recibo de la luz es denunciado directamente como un “atraco”: “No al atraco eléctrico. Luz a precio justo” (pancarta); “Manos arriba, esto es un recibo” (voz). En cuanto a los mensajes en los que se habla de muertes, en la mayoría de ellos aparece la pobreza energética como la causante de esas muertes, ejemplos: “La pobreza energética mata” (pancarta); “No más muertes por cortes de luz” (voz); “La pobreza energética se cobra miles de vidas en el Estado español” (pancarta); “Sin luz ni calor mueren ya miles, sin electricidad” (pancarta). En estos mensajes la pobreza energética es un artífice un tanto abstracto e impersonal detrás del cual los verdaderos responsables se difuminan o quedan ocultos. Se sabe que alguien la provoca porque alguien toma las decisiones, pero no había muchas frases que designaran abiertamente a los responsables. No obstante, había una sola frase repetida en múltiples pequeñas pancartas que con una sintaxis sencilla acusaba desgarradoramente: “Las eléctricas roban y matan”. Las presuntas culpables están en el sujeto; sus supuestos crímenes, en el predicado. Eso sí, no se cita a ninguna compañía ni a ninguna persona. Es un responsable colectivo.
La consigna “No son muertes, son asesinatos”, muy conocida porque se ha utilizado para protestar por diversos casos de fallecimientos (incluidos los suicidios) desde que estalló la “crisis-estafa” ¾así se conoce en las protestas la llamada “crisis económica internacional” ¾, también se coreó repetidamente durante la protesta contra la pobreza energética. Es una frase que renombra los hechos intentando desenmascarar la manipulación que se esconde tras la aséptica palabra “muerte”. Con esta consigna se quiere dejar patente que no se trata de muertes accidentales o fortuitas, sino de “asesinatos”, dando a entender que detrás de ellos puede haber, si no intención, al menos culpables. [Adviértase que los significados del lenguaje coloquial de la protesta no han de ser iguales necesariamente que los del lenguaje jurídico]. En este sentido se pueden también interpretar las pancartas que se vieron a lo largo de la marcha en las que se citaba el caso de Rosa, la anciana que falleció en Reus el pasado mes de noviembre tras un incendio en su domicilio, supuestamente por utilizar una vela después de que le cortasen la luz por no poder pagarla. Ejemplos: “Rosa no murió, la asesinaron”; “Rosa, quemada por ser pobre”. En estas pancartas no se nombran culpables, pero su muerte de ningún modo se considera accidental ni se achaca a la propia anciana.
La energía es un derecho
Buena parte de los concurrentes, entre ellos algunas y algunos yay@flautas, llevaban velas encendidas y se abrigaban con mantas para simbolizar la situación en que se hallan las familias que sufren pobreza energética. En una de estas velas se leía “Luz, gas, agua”, que son los suministros que se demandan para una vida digna en la vivienda. Pero fue el acceso a la electricidad el que se convirtió en protagonista. La pancarta de cabecera era grande y solo contenía el nombre de la plataforma convocante, nombre que en sí mismo contiene la reivindicación más perentoria: “Plataforma No Más Cortes de Luz”. Se exigió el derecho a la energía para todo el mundo; una energía simbolizada en la luz. Lemas voceados: “Ni casas sin gente, ni gente sin luz”; “Este invierno, nadie sin luz”. Pancartas: “Mujer mayor sola. Derecho a la luz, derecho a la vida”; “Derecho a la luz, derecho a vivir con dignidad”; “No más cortes de luz ni de calor. Ecologistas en Acción”; “La energía es un derecho. Nadie sin luz. Podemos”.
En los discursos finales sobre el escenario, los oradores pidieron que se regule el derecho a la energía con todas las fuerzas políticas para que ningún hogar se quede sin luz. También se dijo que el Gobierno se mostró impasible ante la ley contra la pobreza energética que presentó la Izquierda Plural, ante la del PSOE, así como ante la ley 25 de Podemos. Durante la marcha los asistentes se dirigieron al Gobierno con gritos como estos: “Este Gobierno nos corta la luz”;  “Sin luz, sin gas, Rajoy, tenías que estar”.
Reivindicaciones
En la Puerta del Sol, sobre el escenario, se leyó el manifiesto y hubo actuaciones musicales a cargo de Salvador Amor, el Coro de Mujeres Entredós y una manifestante que cantó unas “chirigotas”, pero previamente a ello dos activistas, una mujer y un hombre, se dirigieron a los reunidos para explicar los problemas de la pobreza energética. Hablaron nuevamente de la muerte, pero en tono reivindicativo y vehemente: “No vamos a permitir que nadie muera de frío en este país”. La oradora dijo que la pobreza energética provoca exclusión social e indicó que “genera enfermedades, agrava las preexistentes y es causa de muerte”. Añadió que la OMS señala que el 30% de las muertes sobrevenidas en los meses de invierno se relacionan con esta forma de pobreza. El otro orador denunció el “reverso profundamente criminal” de la pobreza energética constituido por “las delirantes políticas energéticas de este país”; “los pingües beneficios que acumulan las grandes eléctricas”; y “la terrible ostentación de las puertas giratorias”.
La activista Cote Romero y el periodista Javier Gallego Crudo leyeron el manifiesto, en el que otra vez más se hizo alusión a las muertes. En el texto, primero, se aportan estas cifras: “7 millones de personas tienen dificultades para pagar la factura de la luz y más de 5 millones se quedarán sin calefacción durante este invierno”. Después, se denuncia que las muertes por pobreza energética son “invisibles”, aunque cada año mueren en España más personas por esta causa que por accidentes de tráfico. Esta “grave situación” está provocada por la subida de la luz: “Tan solo en los últimos seis meses, el recibo se encareció en un 25%”.
Se pide al Gobierno que regule una tarifa asequible para los consumidores domésticos y una auténtica tarifa social para familias de baja renta. Igualmente se exige que España cumpla con la legislación internacional y europea que se refiere al acceso a los suministros: el artículo 25 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos; la Observación general Número 4 del Comité  de Derechos Económicos, Sociales y Culturales; y el artículo 3 de la Directiva 2009/72/CE, de 13 de julio de 2009.
El manifiesto contempla seis reivindicaciones claramente expresadas:
1. Prohibición legal de todos los cortes de luz a familias con problemas económicos. Las eléctricas deberán dirigirse a la administración para comprobar la situación de las familias que no abonen sus recibos. Si sufren vulnerabilidad económica, no podrán cortarles el suministro y el coste será asumido por las compañías.
2. Fin de los abusos tarifarios. Aprobación de una tarifa asequible, regulada por el Gobierno, a la que podrán acogerse todos los consumidores domésticos en su primera residencia.
3. Creación de una auténtica tarifa social. Sustitución del actual bono social por una tarifa de reducida cuantía dirigida a las familias con bajos niveles de renta, sufragada por las eléctricas.
4. Reconocimiento y devolución por parte de las grandes eléctricas de los 3.500 millones de euros que cobraron indebidamente en conceptos de Costes de Transición a la Competencia (CTCs).
5. Auditoria al sistema eléctrico. Realización de un análisis de los costes del sistema desde que se puso en marcha la liberalización del sector, con el objetivo de determinar el precio real de las tarifas eléctricas.
6. Aplicación del tipo de IVA superreducido a la electricidad, pasando del 21% actual al 4% por ser considerado un servicio esencial para la ciudadanía.
Puedes firmar el manifiesto
A la protesta acudieron diversos colectivos sociales, sindicatos y partidos políticos de izquierda. También se vieron dos banderolas del PSOE, aunque esta organización fue abucheada: “Ista, ista, ista, PSOE, oportunista”. Entre las formaciones políticas se vieron los símbolos de Equo, Podemos, Unidos Podemos, PCE, Juventudes Comunistas;  y la pancarta “Que no nos jodan la vida”, portada por miembros de Izquierda Unida. Del mundo laboral destacaban las banderolas y pancartas de USO Madrid y CC OO, además de un nutrido grupo de trabajadores de Coca-Cola en Lucha. Entre los colectivos sociales, los siguientes: Alianza contra la Pobreza Energética, Plataforma por un Nuevo Modelo Energético, Greenpeace, Ecologistas en Acción, Anticapitalistas, Yay@flautas Madrid, la PAH de AlcoSanse y más grupos de la PAH y de asambleas populares de diferentes barrios de la capital y de la comunidad autónoma.
Algunas de estas agrupaciones que asistieron a la marcha figuran también en la web de la Plataforma No Más Cortes de Luz, donde se dice que la iniciativa ha sido impulsada por veintisiete organizaciones de la sociedad civil, se han adherido nueve partidos políticos y han firmado el manifiesto casi veintiseis mil particulares. Y es que cualquier persona puede firmarlo con tan solo rellenar los datos de un breve formulario.
Sucesión de hechos desde la movilización
21 de diciembre de 2016
El mismo día de las protestas el Gobierno y el PSOE firman un acuerdo para prohibir los  cortes de luz a hogares vulnerables. Fuera del pacto ha quedado Unidos Podemos y Ciudadanos ha realizado aportaciones. Todo el desarrollo parlamentario se prolongará unos tres meses. Facua, una de las impulsoras de la campaña No Más Cortes de Luz, ve el acuerdo como una “tomadura de pelo” y se queja porque permitirá a las eléctricas seguir cortando la luz a familias sin recursos durante este invierno. Exige “la aprobación inmediata del real decreto ley  para que se prohíba a las eléctricas cortar la luz a cualquier familia desde el día siguiente a su publicación en el BOE”.
23 de diciembre de 2016
El Consejo de Ministros aprueba el decreto ley pactado entre PP, PSOE y C’s para establecer el mecanismo de financiación del bono social eléctrico.
17 de enero de 2017
El Ministerio de Energía y los grupos políticos acuerdan utilizar el criterio de renta para conceder el bono social eléctrico.
18 de enero de 2017
En plena ola de frío se anuncia que el coste de la luz subirá a partir de las ocho de la noche. El precio alcanzará un nuevo máximo desde diciembre de 2013.
Álvaro Nadal, ministro de Energía, declara que el recibo de la luz se va a encarecer unos 100 euros este año.
El precio de la electricidad ocupa un lugar preeminente entre las noticias de los medios de comunicación. En las redes sociales los ciudadanos expresan su descontento y promueven un apagón de la luz para las siete de la tarde; la etiqueta #ApagaLaLuz  se convierte en trending topic.
20 de enero de 2017
La fiscalía de lo Civil del Tribunal Supremo investigará las razones que están originando los sucesivos aumentos del precio de la luz en los últimos días.
23 de enero de 2017
Se prevén nuevas subidas en el precio de la electricidad una vez pasada la ola de frío.


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sábado, 19 de noviembre de 2016

“Ante el golpe de la mafia, democracia. No a la investidura ilegítima”. PACÍFICA, COMUNICADA, MASIVA

Todos los carriles de la calle de Alcalá se iban llenando de gente antes de que la cabecera de la protesta hubiese llegado a la glorieta de Cibeles. Había manifestantes que se encaminaban hacia la  Puerta del Sol sin esperar al grueso de la marcha. Otros aguardaban alrededor de la fuente de la diosa para incorporarse. Cuando se oyeron los gritos de las proclamas procedentes del Paseo del Prado, los fotógrafos, camarógrafos, curiosos y manifestantes que aguardaban se agolparon frente a la pancarta de cabera que se aproximaba a Cibeles; todos querían conseguir imágenes de la protesta que tendría lugar en Madrid el mismo día de la investidura. En ella se rechazaba el golpe dado en el PSOE para quitar al secretario general, Pedro Sánchez, que reiteradamente  defendió votar “no” a la investidura de Rajoy. El partido pasó a ser dirigido por una gestora y se decidió la abstención en contra de algunos dirigentes y sin consultar a las bases. Los acontecimientos posteriores eran previsibles: con la abstención del PSOE Rajoy sería nuevamente presidente del Gobierno. El sábado 29 de octubre alrededor de las ocho de la tarde tendría lugar la segunda votación para la investidura. La manifestación fue convocada por la Coordinadora 25‑S para las seis de la tarde con el lema “Ante el golpe de la mafia, democracia. No a la investidura ilegítima”. Mientras sus señorías debatían y votaban en el Congreso, los manifestantes caminaron desde Neptuno hasta la Puerta del Sol y, precisamente a las ocho, esta plaza y sus calles aledañas eran un hervidero humano. La aglomeración, la gente encaramada a la “ballena” (entrada al tren de Cercanías), las banderas republicanas ondeando en lo alto, las pancartas y los cánticos recordaban la ocupación de la plaza por el movimiento 15M en mayo de 2011.
No se rodeó el Congreso
Los medios de comunicación dieron notable relevancia a la protesta incluso antes de producirse, en parte porque le achacaron un carácter violento que luego no tuvo. Los medios insistían en referirse a la protesta como un “Rodea el Congreso”, aun cuando su trayecto de Neptuno (plaza Cánovas del Castillo) a la Puerta del Sol pasando  por Cibeles ya había sido comunicado a la Delegación del Gobierno. Por tanto, era de sobra conocido que no se pretendía rodear el Congreso. La Coordinadora 25‑S convocó un “Rodea el Congreso” el 25 de septiembre —de ahí el nombre del colectivo— de 2012; en aquella ocasión sí hubo disturbios en Cánovas del Castillo y en la estación de Atocha. Algunos medios de comunicación atribuyeron anticipadamente a la protesta de octubre de 2016 nombres y rasgos de la de 2012 sin tener en cuenta los nuevos datos.
El matiz agresivo que le supusieron fue desmentido por la realidad de una protesta pacífica y en parte festiva, esto último gracias a la batucada que la acompañó y al buen humor, los cánticos y los bailes de los colectivos juveniles. A pesar de todo, en el relato informativo ha sido muy destacado el incidente que tuvo lugar una vez acabada la protesta, en el que intervino un grupo de manifestantes que en las cercanías del Congreso arrojaron monedas y pequeños objetos a algunos políticos cuando salían. Por lo que se refiere al despliegue policial, según informaron los medios de comunicación repetidamente y con mucha antelación, fue muy superior al habitual de otras manifestaciones madrileñas. Como es costumbre ante este tipo de protestas masivas, las inmediaciones del Congreso estaban cercadas por vallas y agentes de la Policía Nacional y, en el cielo, fue constante  la presencia de un helicóptero.
“Gran  coalición encubierta”
En el comunicado de la Coordinadora 25-S para anunciar la protesta se desarrolla el lema de la pancarta de cabecera “Ante el golpe de la mafia, democracia. No a la investidura ilegítima”. Indican que “el golpe de régimen se ha consumando, Rajoy  será finalmente investido”, y añaden: “Será un Gobierno ilegítimo de un Régimen ilegítimo”. Mencionan tres mafias que se llaman igual que tres conocidos casos de corrupción: “la mafia de Nóos”, “la mafia de los ERE”, “la mafia de la Gürtel”. “El golpe”, según el lema de la pancarta, lo da “la mafia”, así la corrupción queda relacionada con el autoritarismo. Opinan que es la oligarquía la que ha realizado movimientos en Ferraz (sede del PSOE) y en el Congreso para impedir un Gobierno alternativo al del PP. Según el comunicado, lo que se pretende es “continuar los ataques sociales y los nuevos recortes impuestos desde Bruselas”, y quien va a hacer eso es la “gran coalición encubierta”. Con estos términos aluden a la coalición del PSOE con la derecha ¾PP y Ciudadanos¾, propuesta por los líderes socialistas más conservadores y por las élites económicas para evitar que se llegase a formar Gobierno con otra alianza: la del PSOE con la izquierda ¾Unidos Podemos¾ y los nacionalistas. Si en el lema de la pancarta se reivindica democracia, en el comunicado se agrega: “Frente a su Congreso vacío de democracia oponemos nuestras plazas llenas de lucha”.
Por enésima vez, “PSOE, PP la misma mierda es”
Gran parte de los mensajes orales y escritos de la marcha se dirigían a los dos partidos políticos mayoritarios; se equiparó a ambos y como viene sucediendo en múltiples protestas desde la movilización del 15M, otra vez más y a pleno plumón, se proclamó “PSOE, PP la misma mierda es”. Con frecuencia también se oía “Que no (3) nos representan y “Esta investidura es una basura”. Los mensajes no sólo iban destinados a los partidos, también a los dirigentes protagonistas de los últimos acontecimientos, especialmente a Felipe González ¾expresidente del Gobierno (PSOE) y exconsejero de empresas privadas¾, Susana Díaz ¾presidenta de la Junta de Andalucía (PSOE)¾ y Mariano Rajoy ¾presidente del Gobierno (PP)¾. Se coreó, por ejemplo, “Felipe, golpista, eres un fascista” y “Este presidente es un delincuente”. Los de Jóvenes en Pie animaron la protesta con su energía, sus tambores y esta canción: “Susanita quiere un sillón / un  sillón en Madrid / y sabe que con una abstención / para allí se va a ir”. Se exhibieron carteles con  retratos fotográficos de Susana Díaz y otros dirigentes socialistas partidarios de la abstención en los que se les tildaba de traidores. Las pancartas que se referían al PP aludían al latrocinio y a la represión: “PP engaña, roba y amordaza”; “PP: falsario, feroz, ladrón, tirano”. Sin mencionar concretamente a ningún partido se coreaba “Ladrones, ladrones” y “Diles que se vayan (3) de una puta vez”. Las banderas republicanas fueron muy abundantes, lo mismo se portaban en su correspondiente mástil que se llevaban como bufanda, a modo de capa, rodeando el cuerpo o haciendo de falda. Un grupo llevaba sobre la solapa pegatinas en las que estaban estampadas la bandera republicana y la frase “Que se vayan los Borbones”.
A la convocatoria se adhirieron más de ochenta colectivos, según publicó la Coordinadora 25‑S. Durante la marcha se vieron, entre otras, pancartas y banderolas de Izquierda Unida, Izquierda Castellana, PCE, Juventudes Comunistas, 22M Marchas de la Dignidad, Solidaridad Obrera, Unidos Podemos, Tribunal Ciudadano de Justicia, Sindicato de Estudiantes, Anticapitalistas, Plaza de los Pueblos y de algunas asambleas populares del 15M; también estaba presente Alternativa Socialista (CLI‑AS) con su pancarta “Salvemos el Socialismo”. La Coordinadora 25‑S indicó en su web que la convocatoria de Madrid sería secundada con concentraciones en varias ciudades del Estado. Aparte de estas movilizaciones pero para mostrar también su rechazo a la investidura de Rajoy, a las siete de la tarde del viernes 28 hubo una concentración en la Puerta del Sol con el lema “No nos resignamos” en la que participaron Izquierda Abierta, Convocatoria Cívica,  Recortes Cero y otras organizaciones.

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lunes, 14 de noviembre de 2016

En 2016 y luchando contra las reválidas y la educación franquista del Partido Popular

En Madrid la manifestación multitudinaria de las seis de la tarde del miércoles 26 de octubre contra las reválidas, la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) y los recortes educativos del PP cerraba una jornada de huelga en la enseñanza. La marcha partió de Cibeles ¾debía salir de Neptuno pero se modificó el lugar de inicio¾, pasó frente al Ministerio de Educación y finalizó en Sevilla (boca de la estación de Metro), donde se ubicaba el escenario sobre el que una joven leyó el manifiesto. Los medios de comunicación informaron sobre esta manifestación de la tarde y de otra que hubo por la mañana también en Madrid, así como de las que se realizaron en otras ciudades españolas.
La pancarta de cabecera de la manifestación de la tarde de Madrid contenía  tres reivindicaciones principales: “Retirada de las reválidas, derogación de la LOMCE, reversión de los recortes”. Estaba acompañada de los logotipos de los colectivos que integran la Plataforma Regional por la Escuela Pública: la Marea Verde de la Comunidad de Madrid, FAPA Francisco Giner De los Ríos, CC OO Enseñanza, UGT‑FETE, STEM Intersindical, Federación de Movimientos de Renovación Pedagógica de Madrid, Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid y Sindicato de Estudiantes. En el manifiesto se dice que han convocado la manifestación conjuntamente la Plataforma Estatal, la Regional y las Locales. En dicho texto se desglosan los motivos que justifican las tres principales reivindicaciones que contiene el lema de la jornada. En primer lugar, se pide la retirada de las  reválidas porque son “un modelo pedagógico arcaico”, “deslegitiman al docente”, “niegan la titulación” a los estudiantes y “frenan el acceso al Bachillerato y a la Universidad”; son un negocio para unos pocos y están cuestionadas por toda la comunidad educativa. En segundo lugar, se exige la derogación de la LOMCE porque es una “ley sin justificación” no acompañada de un “análisis riguroso del sistema educativo” que estaba vigente; y se desaprueba por ser “partidista”, “conservadora”, “neoliberal”, “clasista”, “sexista”, “recentralizadora”, “autoritaria” y, además, “desconfía del profesorado y la comunidad educativa”.  En tercer lugar, reivindican la reversión de los recortes y denuncian que la inversión educativa “si se mide en términos del PIB” ha pasado en España “del 4,99 por ciento en 2009, año en el que más se aproximó a la media de la UE, al 4,36 en 2013”.
Una ley clasista
Los cánticos y lemas de los congregados reflejan que la educación sigue estimándose como un terreno propio de la lucha de clases, ejemplos: “¿Qué quiere la derecha? ¿Qué quiere el capital? Que el hijo del obrero no pueda estudiar”; “El dinero del banquero para el Instituto obrero”; “Obreros y estudiantes, unidos y adelante”. Por supuesto, también se gritó “¡Viva la lucha de la clase obrera!”. La retirada de las reválidas aparecía en la mayoría de los mensajes y algunos de ellos las consideraban innecesarias y propias de la dictadura: “No queremos reválidas, ya somos válidos”; “Fuera las reválidas franquistas. Sindicato de Estudiantes”. La Coordinadora de Servicios Públicos de la Sierra Norte pedía “Menos reválidas y más profesores”; y pequeños carteles reclamaban Vicálvaro como “distrito sin reválidas”. Los grupos de estudiantes universitarios en sus mensajes orales y escritos ampliaban las reivindicaciones: rechazan el 3+2 (3 grados y 2 másteres) “por caro y clasista”, las prácticas no remuneradas y las subidas de las tasas; asimismo gritaban contra las privatizaciones: “Fuera las empresas de la educación”; “No a la privatización de la sanidad y la educación”. Una joven mostraba un cartón en el que se leía “Por la Filosofía” y de vez en cuando se coreaba “Menos policía, más Filosofía”. Como es habitual en las protestas educativas se reivindicó el laicismo: “Por una escuela pública y laica. Fuera la religión de la escuela” (pancarta).
La LOMCE o “ley Wert” —nombre del ministro que la defendió— es rechazada en su totalidad. Un joven llevaba un cartel que decía “No al Wertedero”, y sobre la “ballena” (cúpula acristalada) de la Puerta del Sol habían colocado esta pancarta: “Salta a la vista, la LOMCE es fascista” Algunos colectivos iban más allá y abogaban por buscar otra idea de educación: “Llevamos una escuela nueva en nuestros corazones. CGT Enseñanza Madrid”; “A luchar por la educación que soñamos. Frente de Estudiantes”.
La protesta se desarrolló pacíficamente y estuvo muy animada debido al vigor y entusiasmo de los participantes juveniles que saltaban, cantaban, danzaban, se agachaban, corrían. Había una enorme batucada situada hacia la cola de la protesta, la mayoría de sus integrantes vestían camisetas verdes y la gente a su alrededor no paraba de bailar. El público era de todas las edades: desde niñas y niños de Infantil y Primaria con sus familias hasta chicas y chicos  con las pancartas de sus institutos de Bachillerato y Formación Profesional. Había pancartas de “La Ecoaldea” y de “Economía Alternativa” de la Universidad Complutense de Madrid. Entre los partidos políticos llevaron sus símbolos para hacerse visibles IU, PCE, Podemos, Equo y Anticapitalistas. Contra la LOMCE estaban todos los colectivos estudiantiles que participaron, aunque había enfrentamiento entre ellos, por ejemplo el Bloque Antifascista Universitario decía que Sindicato  de Estudiantes no les representaba. Otros grupos concurrentes fueron CEAPA,  el Frente de Estudiantes, el Bloque Estudiantil Universitario, Solfónica, Latinoamerican Organismo Sociopolítico y  Yay@flautas.

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viernes, 11 de noviembre de 2016

No a los tratados que empobrecen: CETA, TTIP y TISA

Después del verano la primera manifestación masiva fue la del 15 de octubre contra los tratados de libre comercio: el CETA (Comprehensive Economic and Trade Agreement), entre la UE y Canadá; el TTIP (Trasnatlantic Trade and Investment  Partnership), entre la UE y Estados Unidos; y el TISA (Trade In Services  Agreement), acuerdo internacional para liberalizar el mercado de servicios. La marcha comenzó a las seis de la tarde en Atocha (plaza del Emperador Carlos V), recorrió el Paseo del Prado y terminó en Cibeles frente al Ayuntamiento, donde estaba el escenario para la lectura del manifiesto. En esta convocatoria, con motivo del Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza (17 de octubre), se denunció la desigualdad social y el empobrecimiento ya existentes, los cuales se supone que se agravarán con la aplicación de los tratados. Los convocantes fueron la Alianza Española contra la Pobreza  y la Campaña No al TTIP;  entre ambas plataformas agrupan a diversas organizaciones políticas, sindicales, ecologistas, pacifistas, culturales, de ayuda al desarrollo, etc. La acción es parte de la campaña Otoño en Resistencia, que se ha celebrado del 8 al 15 de octubre de 2016 en varias ciudades españolas con manifestaciones, concentraciones, conferencias, debates, talleres y otros eventos.  
En la cabecera iba la cabina de un camión con estas pancartas: “Unidos por un transporte digno”; “Mismo trabajo, mismo salario”. Después seis taxis forrados de carteles: “Taxistas contra el TTIP”. Ondeaban las banderolas de Élite Taxi y resonaban las bocinas y sirenas de los vehículos. Otro pequeño camión tenía un equipo de megafonía para animar a los presentes; por su micrófono se indicó que había “más de 20.000” personas. El grueso de la muchedumbre lo presidía la gran pancarta de los convocantes: “Las personas y el planeta por encima de las multinacionales. No a la pobreza, no a la desigualdad, no al TTIP. Alianza Española contra la Pobreza”. La de la otra plataforma convocante decía “TISA, CETA, TTIP,  tratados que empobrecen. www.noalttip.org”.
Una cadena de grandes eslabones amarillos fue sujetada por un buen número de asistentes. Se llevaba extendida a lo largo —de delante hacia detrás— y se puede interpretar como un símbolo de lo que pueden traer los tratados: encadenamiento, esclavitud. Precisamente la esclavitud y los perjuicios para la clase obrera fueron muy denunciados en las pancartas: “La clase obrera contra la esclavitud del TTIP y el CETA. Bloque Combativo y de Clase”; “TTIP, peligro de muerte de conquistas sociales y laborales. No a los mercados sobre las personas. CGT”; “Contra la Europa de las desigualdades. Justicia social y ambiental. Ecologistas en Acción”; “Ni TTIP ni CETA. Por la clase obrera y lo pueblos. PCPE”. Algunos mensajes se dirigían directamente a la UE: “Fuera la UE y sus mercaderes. Soberanía, trabajo digno, servicios públicos, sostenibilidad. PCE Madrid”; “STOP TTIP. Las transnacionales ordenan, la UE acata, la clase obrera pierde. Juventudes Comunistas”; “Fuera, fuera, fuera de la Unión Europea” (voz). También había una pancarta contra el fracking, otra reclamando “soberanía alimentaria” y un “mundo rural vivo”. La petición de la Asociación Universitaria Conciencia Minera fue esta: “Defiende nuestra energía, alimentos, derechos laborales y servicios públicos”.
En esta protesta contra los tratados de libre comercio, aparte de los partidos políticos, sindicatos y colectivos de la sociedad civil  mencionados anteriormente, también se vieron símbolos de IU, Unidos Podemos, círculos locales de Podemos, Equo, Anticapitalistas, Recortes Cero, ATTAC, UGT, CGT, CGT Enseñanza, CC OO, Coca‑Cola en lucha, AJUPE USO, Co.bas, Solidaridad Obrera, Corriente Roja, Yay@flautas, Marea Básica, Marea Verde, Plataforma por la Remunicipalización de Servicios Públicos de Madrid, Marchas de la Dignidad 22M, asociaciones por la memoria histórica y asambleas populares del 15M.
Al llegar a Cibeles la cadena de eslabones amarillos se había roto, dando a entender que la lucha había logrado vencer las ataduras de los tratados. En el escenario que se preparó frente al Ayuntamiento la periodista Olga Rodríguez y el locutor Juan Luis Cano leyeron un manifiesto, en el que, entre otras cosas, se advierte sobre los peligros de los tratados: “Por ello, nos oponemos a los tratados de libre comercio que ahondan la brecha de la desigualdad  y amenazan la democracia. Acuerdos que afectarán negativamente a la cultura, a los servicios públicos, a los derechos laborales y ambientales. Pondrán en peligro la agricultura tradicional y la soberanía alimentaria; reducirán el derecho a la salud en beneficio de las grandes farmacéuticas; priorizarán los combustibles fósiles en detrimento de las energías renovables. Y, sobre todo, limitarán nuestro derecho y capacidad para construir y lograr una sociedad más justa”. En el texto se critica que los tratados sean negociados “a espaldas de la ciudadanía” y se pide su paralización porque “multiplican el poder de las multinacionales y limitan los derechos de las personas y la protección del medioambiente”. Una vez acabada la lectura, los reunidos gritaron “Este tratado lo vamos a parar”. Finalmente, Juan Luis Cano anunció la actuación de la Solfónica para poner el “broche de oro” a la jornada. El grupo interpretó una canción contra el TTIP con la música de Bienvenido Mr.Marshall (película de Luis García Berlanga) y, al terminar, muchos de los presentes le acompañaron entonando el Canto a la Libertad de Labordeta.

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lunes, 17 de octubre de 2016

“Los banqueros robando, los jueces ayudando”. La PAH pone en evidencia a los jueces ante la sede del Tribunal Supremo

El telón de fondo de todos los eventos era la fachada del Tribunal Supremo, la de verdad, la que da a la plaza de la Villa de París. Los superhéroes de esta historia, los que por todo el territorio nacional paran desahucios y rescatan familias con sus “abrazos de acero” —como dijo en su poema el periodista Javier Gallego—, agrupados en la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), tomaron esta plaza los días 6, 7 y 8 de octubre para desarrollar las “Jornadas por el derecho a la vivienda ante el Tribunal Supremo”. El lema de la convocatoria “Sin justicia no hay derechos” estaba escrito en una pancarta que constituía un fondo de escenario más cercano, más íntimo, para cobijar a los diferentes conferenciantes. Nada más, no había ni tarima ni plataforma elevada sobre el escenario, tan solo unas sillas de plástico blanco iguales que las que se destinan para el público. Los héroes, sin máscara y ataviados con camisetas o chalecos donde se lee “PAH” o “Stop desahucios”, estaban por todas partes: en el escenario, sentados o de pie entre el público, en los tenderetes improvisados; colocando pancartas, preparando paellas. La heroicidad no suele ser cosa de masas, en fin, que no eran muchos; quizá de 200 a 300 en el evento más concurrido; no obstante, quién sabe, en tres días y dos noches pudo haber pasado bastante gente. Sí, en la plaza de la Villa de París unos pocos —la policía no permitía más de quince— pernoctaron, lo llamaron “La noche sin techo”. Las mujeres y hombres de la PAH que defienden con suficiente arrojo los Derechos Humanos acudieron a esta plaza flanqueada por las sedes del Tribunal Supremo, el Consejo General del Poder Judicial y la Audiencia Nacional para plantar cara a los jueces y exigir justicia. Denuncian su papel al lado de los poderosos y los usureros en esta gran estafa oculta tras la palabra “crisis”. Allí, prácticamente a las puertas de las más altas instituciones judiciales, el primer día cuando ya había oscurecido una batucada coreó una frase que se ha convertido en simbólica —no fue creada para la ocasión sino que lleva tiempo voceándose—, que sintetiza el deterioro moral y democrático que presienten también en los que debieran impartir justicia: “Los banqueros robando, los jueces ayudando”.
“Régimen de injusticia”
El jueves seis a la nueve de la noche se inauguraron las jornadas con la intervención del periodista Javier Gallego (de Carne Cruda) y la lectura del manifiesto por parte de una joven con acento iberoamericano. Seguidamente se guardó un minuto de silencio por todas las víctimas de la crisis-estafa y, después, apareció en la plaza la batucada coreando consignas, ataviada con pelucas y ropas de vistoso colorido.
En el manifiesto se recuerda que desde 2008 (fecha del colapso económico) aumentó el desempleo y se deterioraron las condiciones de vida, y añade: “Desde entonces más de 600.0000 ejecuciones hipotecarias, de dudosa legalidad, han expulsado 200.000 hogares, sin importar la presencia de niños, mayores o dependientes”. Estima de “crisis humanitaria” la situación, ante la cual “los poderes públicos rescataron a los especuladores con 53.000.000.000 €”. Recuerda, entre otras cosas, que rechazaron la ILP (Iniciativa Legislativa Popular) apoyada por un millón y medio de firmas para detener los desahucios y a favor de los alquileres sociales, y que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea condenó a España por sus leyes hipotecarias. Además, cabe destacar dos frases que reprocha al Tribunal Supremo, concretamente dice: “En particular, el Tribunal Supremo mantiene a día de hoy que ‘las ejecuciones hipotecarias no se pueden suspender porque no son tan perjudiciales para los deudores’ (23/12/2015), o que ‘las cláusulas suelo son abusivas, pero que devolver todo el dinero a los afectados sería peligroso para el sistema financiero’ (09/05/2013)”. Estas frases fueron también duramente criticadas por algunos oradores a lo largo de las jornadas.
Tras mencionar los sucesos que han ido deteriorando el bienestar y recortando derechos (los desahucios, la venta de viviendas sociales a fondos “buitre”, la pobreza energética, la ley mordaza, los recortes sanitarios y educativos, la estafa de las preferentes, la corrupción, etc.), el texto concluye denunciando un “régimen de injusticia”, a pesar de que muchas leyes apelen a una “JUSTICIA” que defienda al débil y castigue al culpable o que hablen de proteger el ejercicio de los Derechos Humanos.
Reparación para las víctimas y castigo de los culpables
El manifiesto contiene seis exigencias dirigidas al “mundo de la justicia”:
“1) La aplicación directa de la Declaración Universal de Derechos Humanos, ordenando la paralización inmediata de todos los desalojos sin alternativa de vivienda digna.
2) La aplicación efectiva de la normativa europea (TJUE) que obliga a eliminar todas las cláusulas abusivas de los contratos, compensando a los afectados por los daños producidos. En consecuencia, deben anularse todos los procedimientos ya terminados en los que no ha existido derecho a la defensa y cancelar las deudas generadas en esos procesos ilegales.
3) Que se investigue y juzgue las actividades presuntamente delictivas de las entidades financieras que promovieron la burbuja y se beneficiaron de la crisis, depurando judicialmente las responsabilidades políticas.
4) Promover la despenalización de la ocupación de viviendas vacías por necesidad, y la tipificación del delito de usura.
5) Investigar la venta de viviendas sociales a Fondos Buitre, proteger a las víctimas de sus desahucios y adoptar medidas de reparación al daño causado.
6) Por último, exigimos la absolución de todos los detenidos y multados por participar en las movilizaciones contra los desahucios, pues no han hecho sino cumplir con su deber de defensa de los Derechos Humanos”.   
Como se puede observar, en algunas de estas reivindicaciones se contempla la reparación para las víctimas y el castigo para los culpables. En esto también hizo hincapié Javier Gallego en su discurso inaugural. Tras pedir justicia y que se cumplan las sentencias de los tribunales europeos, Gallego indicó que hay que reconocer — por parte del Gobierno y los jueces— que se ha desahuciado injustamente en España. Agrega que han de pagar los culpables: “Queremos ver sentados en el banquillo a todos los que han provocado este agujero”. Respecto a las víctimas señala que hay que reconocer el daño que se les ha hecho. Observa que muchos no saben que las víctimas son los desahuciados, los dependientes o los despedidos. Explica que hay que conseguir reparación para las víctimas, no sólo para el daño económico, sino también para “el daño moral, psicológico” y menciona la “humillación”. En su opinión, “tendría que haber una reparación de todas las víctimas de esta estafa”; apostilla: “que los culpables restañen las heridas de las víctimas”.  
Se cuestiona la independencia de los jueces
El viernes siete a las seis de la tarde los buitres de cartón acechaban colocados en los setos de la plaza. Uno estaba rodeado de billetes de 500€; otro, con las alas extendidas situado a la izquierda, miraba para el escenario. También a la izquierda una pancarta rezaba “No toleramos ni un desahucio más, ni niños en la calle”. A la derecha, antes de llegar al equipo de sonido, sobre una cuerda había tendidos enormes baberos en los que habían escrito nombres, se supone que de bebés, y la palabra “desahuciado”. Continuaban en la plaza los tenderetes con folletos y camisetas. Para esa hora estaban anunciados mesa redonda y debate con este título: “Vivienda, Derechos Humanos y Justicia”. Físicamente la mesa no estaba, pero sí las sillas blancas para todos sus integrantes: la moderadora, la periodista Olga Rodríguez, y los activistas de Amnistía Internacional, No Somos Delito, el Tribunal Ciudadano de Justicia y la Plataforma de Afectados por la Hipoteca. Todas las sillas destinadas para el público estaban ocupadas y había personas de pie escuchando a los oradores, aunque, ciertamente, no abarrotaban la plaza. Las parejas de la Policía Nacional vigilaban de lejos. La temperatura de la tarde era agradable, no hacía ni frío ni calor; el ambiente, tranquilo, relajado. Cada conferenciante realizó ordenadamente su exposición.
El último fue un activista de la PAH, un joven abogado que explicó el escaso compromiso de los jueces. Indicó que habían invitado a participar en las jornadas a una asociación progresista de jueces, pero que estos, tras muy buenas palabras, rechazaron acudir. Durante el debate los activistas convinieron en señalar la falta de independencia del poder judicial. El joven abogado señaló al respecto que existe un “medio ambiente” y un sistema de premios y castigos que condiciona a los jueces. Aludió a los castigos conocidos sin llegar a mencionar ningún caso concreto.
A propósito de los medios de comunicación se estimó que su papel es muy importante, sin embargo también se cuestionó su independencia. Se quejaron de que los desahucios, que siguen produciéndose a diario, hayan desaparecido del relato informativo. La periodista Olga Rodríguez, por su parte, aseveró que “el periodismo debe ser subversivo”.  
La activista de No Somos Delito habló sobre las leyes mordaza, con las que se está atacando a la protesta social legítima. Al respecto, la activista de Amnistía Internacional declaró que había que seguir reclamando la manifestación sin comunicar.
Llegado el momento de la intervención del público, no se produjo precisamente un debate, aunque los participantes sí daban su opinión, preguntaban o exponían su caso. Así, llegó un testimonio estremecedor cuando una señora tomó el micrófono para decir que esta “crisis” había dejado sin padre a sus hijos. Se preguntaba qué hubiese sido de ellos sin la ayuda de su familia y la PAH. Nadie más (ninguna administración) la había ayudado.
Comenzó a oscurecer y el debate estaba acabando. Luego, alguien cogió el micrófono y preguntó que cuántos se quedaban, para saber las tazas de arroz que había que echar a la paella. Para esa misma tarde-noche estaba prevista la proyección del reportaje Garganta profunda: testimonio de un banquero arrepentido; finalmente, la “noche sin techo”. Así concluiría una jornada en la que por la mañana se pudo disfrutar de una parodia teatral y participar en un taller sobre la querella contra Bankia a cargo del Tribunal Ciudadano de Justicia.
El Gobierno de Rajoy y el Constitucional contra las leyes de vivienda autonómicas
El sábado 8 sobre un seto de la plaza había una ikurriña extendida en la que se leía “Ley de vivienda”. Era la prueba de que alguna PAH vasca había llegado a Madrid. Desde por la mañana estaban programados varios talleres: obra social, vivienda pública, titulizaciones, cláusulas abusivas e IRPH; precisamente este último a cargo de abogados de IRPH Stop Guipúzcoa. Por la tarde los activistas de las PAH de Valencia, Murcia, Barcelona y Madrid expusieron la situación de las leyes de vivienda y las ILP en sus respectivas comunidades autónomas.
La Ley 24/2015, llamada también la “ley catalana” por los oradores, fue reconocida por estos como la más avanzada hasta ahora. El activista de Barcelona explicó todo el proceso que llevó conseguirla. Necesitaban 50.000 firmas para la ILP y obtuvieron 150.000. Después lograron que fuese aprobada en el Parlament de Catalunya. El Gobierno en funciones del PP la recurrió, a mediados de 2016 el Tribunal Constitucional admitió a trámite el recurso y quedó suspendida parcialmente. El activista comentó las ventajas que generó durante los nueve meses antes de la suspensión. En el encuentro se mencionó que el Tribunal Constitucional ha suspendido leyes en esta materia de otras regiones (Andalucía, Navarra, País Vasco y Canarias).
El activista de Murcia explicó que cuando el PP perdió la mayoría absoluta en su comunidad autónoma, la oposición logró que se aprobase su ILP, pero el Gobierno murciano del PP que ha de defenderla, no lo hace. En Madrid se necesitan recoger las 50.000 firmas para la ILP, no obstante la activista aspira a triplicar o cuadruplicar ese número. Otro activista madrileño anunció que en breve comenzarán a preparar la campaña para esa recogida de firmas. 
Femenino genérico, diversidad de procedencias y cultura popular
 Las jornadas celebradas en la plaza de la Villa de París fueron una ocasión para aprender y compartir las diferentes experiencias sobre el activismo en materia de vivienda y Derechos Humanos, el papel de las instituciones judiciales y los medios de comunicación, y otros asuntos esenciales como el compromiso y la solidaridad. Todo esto ya es mucho, pero hubo más aún, por ejemplo la integración de niñas y niños en el evento, pues para el público infantil hubo teatro (“Los tres cerditos”) y función de títeres. El evento acogió a todo tipo de vecinas y vecinos, por lo que se pudo ver diversidad racial y cultural; entre los oradores, los activistas y el público participaron gentes de distintos lugares de procedencia, pues así lo denotaba su acento o su vestimenta. El feminismo se fortalecía con el lenguaje, ya que buena parte de los oradores y oradoras que pasaron por las jornadas usaron el femenino al hablar para incluir tanto a mujeres como a hombres. A lo largo de estos tres días la música la pusieron las batucadas, Mineral Sound System y la Solfónica.


“El poder viene de la solidaridad de los de abajo”
La inauguración de las jornadas estaba prevista para las ocho de la tarde del día seis, pero realmente comenzó a las nueve, ya en la oscuridad de la noche, y no eran muchos los presentes. Sin embargo, todo esto no restó emoción al acto. El discurso del periodista Javier Gallego con su poema, la lectura del manifiesto y el minuto de silencio por las víctimas llevaron a los reunidos a corear en varias ocasiones su consigna más emblemática, su grito de lucha y esperanza: “Sí se puede”. Por ella se les reconoce, es la fuerza y la palabra de los que paran desahucios, de la movilización más poderosa enfrentada a esos que a sus imprudencias y abusos llaman “crisis”. Son los de la PAH.
Javier Gallego en su intervención les reconoció su dignidad, su valor y su poder. Explicó la manipulación que se ha hecho del relato sobre la “crisis-estafa” para culparnos a nosotros”. En su opinión, es un relato falso y hay que recobrar la palabra para contar que los culpables han sido los que gobiernan y los que dirigen bancos y empresas. Añade: “Hay que dar la vuelta al discurso desde los medios de comunicación y la calle. Para Gallego ese es uno de los grandes logros de la PAH: “Habéis conseguido darle la vuelta a la conciencia de este país”.
Recordó la ILP que fue llevada al congreso y el millón y medio de personas que firmaron para apoyar la dación en pago y pedir que se detengan los desahucios; agregó que era uno de los momentos “más memorables” dentro de estos “años infaustos y catastróficos”.
Reivindicó que se cumplan las sentencias de tribunales europeos, se repare a las víctimas y se castigue a los culpables. Pidió que las leyes se adecuen a la realidad social de este país y que se pague la “deuda social” que se tiene con todas las personas que se han visto “sepultadas por este tsunami que ha sido la estafa llamada crisis”. Además, denunció la “pasividad absoluta de los poderes públicos y la administración”.
Gallego indicó que hay que recobrar la “soberanía popular” y habló de recuperar los barrios y de volver a reunirnos. Declaró que la PAH ha demostrado que “si se han parado tres mil desahucios y realojado a tres mil familias, es claro que el poder viene de la solidaridad de los de abajo”. Añade: “Esto lo tenemos que recordar cada día”. Dirigiéndose a los de la PAH: “Habéis levantado a muchas personas del suelo y ese es un poder que os hace inmensos”.
Compara a la PAH con un “ejército de salvación”, pues sus activistas han salvado a muchos afectados. Les otorga una importancia crucial: “Si no hubiera existido la PAH cuando este país se rompía por las costuras y por las heridas y se desangraba, cuando miles de familias salían a la calle con lo puesto o lo poco que habían podido llevarse de  sus de sus casas, si no llegáis a estar vosotros y vosotras para acogerles, para darles ese abrazo, esa protección, ese cobijo, ese refugio, esa casa que habían perdido, este país se hubiera venido abajo, se hubiera destruido”.
Acusa a los gobiernos, “tan indiferentes con el dolor de sus compatriotas”, de haberse beneficiado del trabajo que los activistas han hecho; y a esos activistas les dice: “Habéis hecho lo que ellos tenían que hacer, evitar que la gente cayese al arroyo”.
El protagonista del poema de Gallego es ese “ejército de salvación”. Comienza así: “No tienen más arma que su herida, ni más trinchera que su piel, no han disparado una sola bala, pero han detenido mil con su pecho y con sus manos”. A lo largo del poema insiste en los rasgos de sus armas: “Vencieron al enemigo enfrentándose a sus tanques con migas de pan y abrazos de acero”; “No tienen más fusil que sus palabras”. El autor sigue relatando sus hazañas para concluir  reconociendo su mérito y su importancia  para la vida en común: “Salen cada día a la batalla como un ejército de salvación indestructible que ha defendido a este país del sabotaje y lo ha rescatado de sus propias garras”.


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