jueves, 17 de septiembre de 2009

Piojos mutantes

“Y eso que han cambiado a la niña a un colegio de monjas”, decía una abuela, queriendo aminorar la vergüenza que tener piojos supone, mientras en la droguería compraba un producto para eliminarlos. En la farmacia la señora de delante se dirige al farmacéutico: “Paco, dame eso que es tan bueno para los ’pipis’ “. No recuerdo como se llama, algo así como ‘Tiquixitix’, ‘Pluschesix’ o ‘Superflixtix’”. Paco: “Son veinte euros”. La señora me hace saber que cuesta el doble que los otros, pero lo compra para ver si es el definitivo, ya está harta, lleva todo el verano así. “¿Es loción?” Paco: “Es espray”. Los niños de las vecinas, de los parientes, del parque, de la piscina, casi todos tienen piojos este año. Eso no es lo raro pues generación tras generación los críos han tenido piojos; lo extraño es que no hay forma de erradicarlos. Un dineral se gastan las familias en unos productos farmacéuticos que no son más eficaces que el antiguo remedio del vinagre, por supuesto, bastante más barato.
Durante la guerra y la posguerra los piojos y otros parásitos se achacaban a la miseria y a la consecuente falta de higiene. A mediados de los setenta hubo una enorme plaga y, en cierto modo, se seguía atribuyendo la existencia de piojos a las bolsas de pobreza que había en la periferia de las ciudades. Pero, cuando los niños de mi generación tenían piojos, los padecían –generalmente- sólo una vez. Es decir, se usaba un producto (loción) para eliminarlos y otro (champú, colonia) para prevenirlos. Era suficiente. Me aventuro a señalar que la guerra contra los piojos rebeldes comenzó hace unos veinte años. Había noticias, a finales de los ochenta, en las que las madres se quejaban de las dificultades que tenían para quitarlos de las cabezas de sus hijos. Algunas lloraban porque no los habían tenido de niñas y se habían contagiado de adultas. La pobreza y la escasa higiene ya no cabían en el razonamiento de las causas. Por aquel entonces, como la gente no se podía explicar el fenómeno, surgieron leyendas urbanas a las que –a falta de un argumento mejor- era fácil aferrarse. Se decía que los piojos eran arrojados a los patios de los colegios desde avionetas; también que eran llevados en sacos por las noches a los lugares donde suele haber niños. Como se puede intuir, la imaginación popular buscó culpables siguiendo la pista del dinero.
Hoy persisten las infestaciones por piojos y las dificultades para deshacerse de ellos. Los productos pediculicidas se están usando sobre el delicado cuero cabelludo de los niños semana tras semana de junio a septiembre o más. Champús, lociones, espráis, liendreras, todo un arsenal para combatir al parásito y a sus huevos, pero no hay forma. Surgen nuevas explicaciones. La leyenda urbana da paso a internet. Hay webs en las que los expertos creen que el “pediculus capitis humanus” ha mutado, se ha vuelto resistente. Ahora, en esta época de altas tecnologías, no hay culpables más allá del propio piojo mutante. Un piojo de ciencia ficción, aunque muy real pica en las cabezas de nuestros niños. Sospechoso y de origen desconocido como las gripes esas de verano. Desplegamos la artillería farmacéutica para derrotar al piojo mutante y nones, mientras tanto los laboratorios se están forrando. Hay tantos productos que, cuando vas a comprar, no sabes cuál elegir. El que te recomienden en la farmacia. Primero, los de diez euros, luego, los de veinte. Hay que venderlos todos. El enemigo parece tener aliados. Nos falta determinar quién es el verdadero enemigo. Pobre piojo. Farmacias, droguerías, vinagre de la cocina. Ahora se ha puesto de moda el aceite de árbol de té, de venta en herbolarios. Demasiada oferta absurda. No sé si ir al veterinario y comprarme un collar para perros.
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3 comentarios:

  1. guillaumme dijo
    Casi todas las plagas de parásitos que han sido combatidas con productos químicos se han adaptado y han sufrido mutaciones para sobrevivir, de manea que sí es normal que muchos parásitos tengan épocas de rebrote virulento hasta que volvamos a dar con algo que controle su aparición, en la agricultura el uso de otras especies predadoras de esos parásitos es una práctica muy extendida, pero claro, en nuestras cabezas no lo veo yo de momento posible...Otra solución es atacar a la fertilidad, esterilizando a los individuos que se hospedarían una vez y al terminar su ciclo vital desaparecerían, y como no los repelentes químicos y el corte de pelo cepillo o a lo "chico", entre tanto nostálgico del fascismo y piojos en las escuelas uno anda confuso la verdad...

    18 Septiembre 2009, 10:52

    Celestepv dijo
    Guillaumme, gracias por las posibles soluciones contadas con tanta ironía.

    Veo a las madres y a los padres desesperados, se gastan una fortuna y, semana tras semana, los niños tienen piojos. Van a tener que hacer una campaña, porque de nada sirve que se los quites a un niño, vuelva al cole o a relacionarse y los coja otra vez. Ahora hay muchísimos productos y es más difícil dar con el eficaz. Cuando éramos pequeños había menos productos -hasta podría decir las marcas, tres o cuatro, no recuerdo más-, y nos servían para matarlos y para prevenir. Hoy eso no se está consiguiendo. Ya verás como sacan una vacuna o alguna historia que vendernos. A este paso espero que no sea la del tifus, he leído que las heces del piojo transmitieron mucho tifus en el periodo de entreguerras, las dos mundiales, supongo que también durante la guerra civil nuestra. La vacuna del tifus está inventada, pero son capaces de sacar una con nueva cepa a 300 euros. Todo esto que estoy diciendo es una exageración y un disparate, pero también lo es lo que están padeciendo las familias infestadas con piojos.

    En fin, si los coges, no te rasques, la caca del piojo tiene bacterias y una de ellas es la que transmitía el tifus. A ver como se le dice a un niñ@ de 5 ó 6 años que no se rasque cuando esté infestado. Lo del tifus es una bobada mía, claro que yo le digo a mi difunta abuela que hay gripe de verano y me da dos tortas para clarificarme las ideas.

    Saludos.

    20 Septiembre 2009, 15:42

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  2. guillaumme dijo
    No rascarse cuando a uno le pica es realmente un ejercicio zen, es inevitable, pero siguiendo con curiosidades médicas e infecciosas la propagación de enfermedades tiene a su mayor aliado en la falta de higiene, y eso que los españoles son de los europeos que más se lavan ( yo en eso supero la media, estoy desgastao) de manera que muchas plagas y enfermedades asociadas eran más fruto de tiempos de penurias que de la peligrosidad en sí de la plaga. Como contrapartida hay "estudios" que dicen que alergias , enfermedades como Crhom o SII se deben a una excesiva limpieza, a que nos hemos "cargado" miles de bacterias y nuestro sistema inmune anda despistado( el resto también pero esa es otra historia), y las enfermedades son oportunistas, esperan y esperan su oportunidad, como el rebrote de la tuberculosis con el VIH y demás. LO del corte de pelo no es broma, los niños son reacios a eso del baño y a veces los padres ni tienen tiempo ni ganas, pero no sigo que me lanzo.
    Saludos

    20 Septiembre 2009, 19:49

    Celestepv dijo
    Hola Guillaumme.

    Cierto que algunas de esas plagas se relacionan con la falta de higiene, pero el problema de los piojos de los niños de hoy en día creo que no es ese en su mayoría. Los padres lavan a sus hijos, les compran champús y lociones pediculicidas, productos para prevenir, pero no consiguen erradicar las infestaciones. Aquí veo el problema, en los que se preocupan, atienden y lavan a sus hijos y no consiguen resultados.

    Lo del corte de pelo al cero sé que no es broma. Quizá a los niños (varones) no les guste que les rapen, pero se les puede acabar convenciendo, pero ¿cómo o qué padres se atreven a rapar la cabeza de una niña en edad escolar? Dificilísimo ¿no?

    Saludos

    23 Septiembre 2009, 11:17

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  3. guillaumme dijo
    Bueno rapar rapar al cero no, un buen corte al uno o dos, según el pelo, y entiendo que a las niñas pues eso, no es lo mismo cortar una melena guapa, pero si hay piojos pues nada, corte según la cantidad de pelo y a esperar. No deja de sorprenderme , ayer vi en televisión un anuncio de loción capilar para liendres y piojos, y si se anuncia es que se vende, y mucho...

    24 Septiembre 2009, 11:42

    Celestepv dijo
    Sí, ya lo creo, es un bichito muy rentable, se reproduce muy rápidamente, una buena inversión. Lo mismo un día cotiza en bolsa.

    Gracias Guillaumme. Saludos.

    27 Septiembre 2009, 23:01

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