La frase la pronunció Lourdes Lucía, activista de ATTAC, en la asamblea que las Euromarchas 2015 realizaron en la plaza situada frente al Museo Reina Sofía de Madrid el cuatro de octubre, desde el mediodía hasta las dos, bajo un cielo otoñal totalmente gris. Había poca gente para escuchar las exposiciones de los diferentes oradores y pocos medios de comunicación masiva para difundirlas. La mañana nublada y la amenaza de lluvia no explican por sí solas la desmovilización, ya que en la templada y agradable tarde del día anterior, sábado tres, tampoco fue precisamente masiva la manifestación con la que los madrileños recibieron a las Euromarchas a su llegada a la capital. Por supuesto, en la manifestación hubo más participantes que en la asamblea. La manifestación que culminó en Cibeles con la actuación de la Solfónica, que interpretó la ópera bufa El Crepúsculo del Ladrillo, resultó algo más atractiva para los medios de comunicación, especialmente los llamados alternativos, porque para los predominantes poco de todo esto mereció ser destacado. Angustias, la conocida yayafaluta del 15M, tomó la palabra en la plaza frente al Reina Sofía para quejarse de la escasa asistencia: “No hemos recibido a las Euromarchas como se merecen”. Preguntó dónde estaban los reporteros y los fotógrafos y se lamentó por todos los que no hacen nada. La frase de Lourdes Lucía “Me recuerdan los grupos de la resistencia contra el fascismo en Europa”, aludiendo a las Euromarchas y a los que luchan, quizá sea compartida por muchas personas, pero aquella mañana no estaban allí. Los que luchan en este movimiento de resistencia europeo contra la troika, la austeridad o el TTIP, no recibieron suficiente apoyo en Madrid, la ciudad donde nació el 15M y donde las movilizaciones han sido masivas durante estos últimos años.
Reivindicaciones
En las escaleras que hay frente al museo estaban sentados con sus chalecos amarillos los yay@flautas –alrededor de una decena–; los bancos que cercan la plaza se iban llenando de asistentes a la asamblea, curiosos y turistas; frente al escenario, que estaba al fondo, próximo a la calle Santa Isabel, los congregados que permanecían de pie no llegaban a ocupar ni la mitad del recinto. Las pancartas de las Euromarchas son de fondo azul con letras blancas, como sus camisetas y los autobuses. La que utilizaron para el escenario rezaba: “Euromarchas 2015. Construyamos otra Europa. Por una Europa de las personas, digamos ¡basta! a la Europa del capital”. Los colectivos participantes añadieron tres pancartas más: “Paraísos fiscales, delincuencia organizada”; “No al fracking. Asamblea Merindades Norte Burgos”; y “Absolución de los Campamentos Dignidad Extremadura y el Poder Popular”. Ante el micrófono se presentó el acto afirmando que más de cuarenta organizaciones están implicadas en las marchas. Después se procedió a dar la palabra a seis oradores que disponían de cinco minutos cada uno para hacer su exposición sobre los principales temas de sus reivindicaciones.
Pobreza
Pablo Martínez de la Asociación Española contra la Pobreza recordó que el problema no es nuevo ni solo europeo y que se ha incumplido el compromiso que hubo hace quince años para erradicar “la pobreza de los más pobres”. “Para luchar contra la pobreza tenemos que esperar a que distribuyan los sobrantes de sus cuentas de resultados”, denunció Martínez. Exigió que se tenga en cuenta a los pobres antes de tomar las decisiones, que las políticas sociales no sean subordinadas a los grandes acuerdos que privilegian los intereses de una minoría de gente, y que los procesos se hagan con transparencia: “Lo que se puede acordar a puerta abierta es lo que beneficia a todos y todas”.
TTIP (Acuerdo Trasatlántico de Comercio e Inversión)
Cuca Hernández de la Campaña contra el TTIP habló no sólo del TTIP sino de la existencia de varios tratados a nivel global, como el CETA –con Canadá– y el TISA, en el que están cincuenta países. Denunció que a través de ellos se produce una “apropiación de nuestros derechos” y que “se deja a la democracia sin sentido mediante mecanismos que permiten a las empresas demandar a los estados”, (Mecanismos de Resolución de Controversias entre Inversor y Estado). Añadió: “Cualquier política social transformadora puede ser demandada por una empresa”. Explicó que en el Consejo de Cooperación Reguladora los lobbies o grupos de presión “se sientan en la mesa con capacidad de vetar, modificar o corregir cualquier ley presente, pasada o futura”. Según Hernández, todo esto abre la puerta a las privatizaciones de los servicios públicos o al fracking y proclama un modelo de crecimiento y consumo masivo. Terminó su discurso con la consigna “¡No es un tratado, es un golpe de Estado!”
Austeridad y empleo
Irene de la Cuerda de la CGT definió la troika como “un organismo de tecnócratas no elegidos que dictan políticas económicas de austeridad que determinan el aumento de la pobreza”. Explicó que las normas que los estados tienen que cumplir se articulan en cuatro bloques: políticas donde los salarios deben decrecer; reformas laborales para dar flexibilidad interna y donde el empresario lo decide todo; pensiones que bajo el presupuesto de que no pueden ser asumidas por el Estado deben bajar; y un déficit en el que los estados deben asumir las deudas de las empresas privadas. Agregó que el déficit recae sobre los impuestos que paga la ciudadanía. Tras señalar que los políticos legislan para las élites que controlan el poder económico remachó: “esas leyes son armas de destrucción masiva de nuestros derechos”. Llamó a la ciudadanía a organizarse en los barrios, los pueblos y las fábricas “para dar respuesta a esta agresión del poder absoluto de la troika”.
Deuda
Berta Iglesias de Ecologistas en Acción dijo que el endeudamiento no es coyuntural, sino parte del capitalismo. Afirmó que la deuda atenta contra las personas y el planeta y que es una “herramienta de sometimiento”, como ya se había demostrado antes en los países del Sur, donde las economías se volvieron más dependientes. “La deuda es un traspaso de recursos del pueblo a las élites”, aseguró Iglesias. En su opinión la Unión Europea es “directamente culpable” y fue diseñada desde el origen para beneficiar a las élites. Denunció que los supuestos rescates a Irlanda, Grecia, Portugal y España que obligan a firmar los memorándum de entendimiento “atrapan a las generaciones siguientes”. Tras decir que la deuda aumenta las desigualdades y que es “impagable”, pidió que la asuman las élites. Proclamó: “¡No debemos, no pagamos!”
Servicios públicos
Carmen Esbrí de la Marea Blanca de Madrid (movimiento en defensa de la sanidad pública) aseguró que los servicios públicos “son un goloso elemento para hacer mercado” y “el objetivo más deseado de las transnacionales”. Denunció unos servicios públicos que funcionan con ese nombre, pero en los que hay muchísimas privatizaciones. Según Esbrí tenemos un “Gobierno colaboracionista de un sistema decadente, retrasado y criminal”, y aludió al caso de las muertes de los enfermos de hepatitis C. Reivindicó unos servicios cien por cien públicos. Finalmente señaló que la riqueza se redistribuye con los servicios públicos que además generan empleo.
Otra Europa
“Es una Unión Europea en la que gobiernan organismos que no representan a la ciudadanía, sino a la banca y las grandes corporaciones”, aseveró Lourdes Lucía (ATTAC). También denunció la existencia de paraísos fiscales que sirven a las grandes fortunas para evadir impuestos. En su opinión, estamos ante una “Europa falaz, que permite movimientos de capital y levanta muros para la gente”. También denunció que en las instituciones europeas se haya debatido sobre Venezuela y no sobre Hungría. Acabó su discurso hablando de las Euromarchas que son una “movilización de los que queremos una Europa democrática basada en la dignidad de todas las personas”.
Próximas acciones
Las Euromarchas son una acción conjunta de movimientos sociales y organizaciones políticas y sindicales de diversos pueblos europeos constituidas por cuatro columnas: suroeste (España, Portugal y Francia); sureste (Grecia e Italia); noreste (Países Nórdicos y Alemania); noroeste (Islas Británicas). La columna suroeste partió el uno de octubre en la frontera con Gibraltar –no tenía permiso para hacerlo dentro de la verja– y confluirá con las demás columnas en Luxemburgo; una vez juntas , culminarán su recorrido al llegar a Bruselas, donde permanecerán los días 15, 16, y 17 de octubre. “Tenemos dificultades económicas” aseguró Pedro Arrojó, uno de los organizadores de las Euromarchas, tras tomar el micrófono en la reunión frente al Reina Sofía. Animó a la compra de chapas y camisetas y al crowdfunding. Explicó que la iniciativa salió de la Red de Agua Pública de Aragón y que el tema griego la aceleró: “Era una obligación reaccionar”.
Arrojó distinguió entre dos objetivos: uno es decir ¡basta! y otro es iniciar un “proceso de reconstrucción de Europa”. Rememoró lo logrado por el 15M y las mareas, especialmente por la Marea Blanca de Madrid, y los denominó “movimientos de referencia”.
Entre las acciones que se desarrollarán en Bruselas Arrojó anunció las siguientes: el día 15 rodearán la Cumbre de Jefes de Estado de la UE “de manera no violenta pero decidida”; el 16 tendrá lugar una “explosión de foros” sobre los temas de sus principales reivindicaciones; y para el 17 se prepara una gran manifestación europea en la que intervendrá la Solfónica junto a otros coros del continente e interpretarán Grândola, Vila Morena, una canción griega y el Himno a la Alegría.
En el turno de micrófono abierto a los asistentes tomaron la palabra Paco Sánchez de las Marchas de la Dignidad (22M), Angustias de los Yay@flautas y un hombre que exigía quitar la monarquía. Otro orador se refirió a la OTAN y dijo que se estaba produciendo la mayor movilización militar desde la Guerra Fría. Tras su mensaje, los congregados corearon “OTAN no, bases fuera” y “No a la guerra”. También tomó la palabra un abogado que trató el tema de la vivienda y los desahucios; otro hombre perteneciente al Círculo de Mayores de Sol dijo que los mayores estaban “culturalmente marginados” y pedía que tuviesen más información. Una inmigrante pasó ante el micrófono para recitar un poema de César Vallejo. Antes de concluir el acto se avisó de nuevas convocatorias que tendrán lugar en Madrid: el 24 de octubre habrá una acción contra la OTAN, y el 17 una manifestación de Atocha a Cibeles a las seis de la tarde de apoyo a la marcha de Bruselas. Además se animó a participar en la Euroconsulta, en cuya web hay un formulario en diversas lenguas de Europa.
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