El sábado 11 de mayo a las siete de la tarde se celebró
en el bulevar del Paseo del Prado, a la altura del Palacio de Cibeles,
sede del ayuntamiento de la capital, un Pleno Alternativo convocado por
la Red por la Dignidad de los Barrios y Pueblos de Madrid, otro acto más
dentro de los muchos que se están realizando durante este mes ¾agrupados bajo el nombre de Mayo Global 2013¾
por parte de los movimientos sociales madrileños y que ponen de relieve
su vitalidad, la cual muchos se afanan por poner en entredicho durante
este segundo aniversario del 15M. La ubicación no es asunto menor; se
situaron cerca del ayuntamiento para exigir más democracia, más
participación ciudadana en los plenos de las Juntas Municipales de
Distrito, que se celebran a mediodía, lo cual impide la asistencia de la
mayoría de los vecinos porque a esa hora están trabajando. La Red por
la Dignidad está integrada, entre otras, por asociaciones vecinales,
asambleas populares del 15M y la Plataforma de Afectados por la Hipoteca
(PAH); entre sus acciones anteriores destacan las ocupaciones de Oficinas de Empleo, acción con la que se dieron a conocer, y las marchas subterráneas
con reivindicaciones en torno al transporte público. Todo esto se
explicó durante la presentación del evento en el que, además, se leyeron
los catorce puntos del Plan de Rescate Ciudadano
que este colectivo promueve, entre ellos una renta básica que evite la
exclusión social, una vivienda accesible para todos y transporte
gratuito para desempleados y sus familias.
El
Pleno Alternativo se desarrolló en la cabecera del bulevar, para ello
colocaron de fondo de escenario una pancarta en la que ponía el nombre
del colectivo acompañado de dos lemas, “Rescatar personas, no bancos” y
“Plan de Rescate Ciudadano”; después había unas mesas y unas sillas para
los oradores, además de los equipos de sonido, un panel para proyectar
vídeos y una pancarta de la Plataforma de Trabajadores en Paro de San
Blas y Canillejas. El auditorio estaba sentado en sillas de plástico:
las de las primeras filas eran de color rojo y llevaban el nombre de una
conocida marca de cerveza; el resto, blancas. Hubo momentos en los que
gran parte de ellas estuvieron ocupadas, y también hubo gente que
prefirió permanecer de pie o sentada en el césped. No se percibía gran
presencia policial, apenas cinco o seis agentes cerca de los carriles de
subida. Ante el micrófono se sucedían los diferentes oradores, fueran
profesionales o afectados, nativos o inmigrantes, en un ambiente de suma
tranquilidad y respeto. El profesor de Formación Profesional, Miguel
Angel Gil, de la Plataforma por la Escuela Pública de Vallecas habló de
la importancia del trabajo no solo como sustento, sino también para el
desarrollo individual y social. Denunció que se están restringiendo las
ofertas formativas, por ejemplo, para conducir ambulancias hay que
formarse en el sector privado. Rechazó hablar de “fracaso” escolar,
prefirió llamarlo “abandono”, e indicó que había que cambiar ese sesgo
en la formación, lo cual era un problema con las leyes existentes. Otro
de los profesionales que intervino fue Antonio Ceverino, de la Asamblea
Popular de Hortaleza y psiquiatra de los Servicios de Salud Mental,
quien dijo que la desesperanza y la pobreza llenan los hospitales más
que las enfermedades mentales. Añadió que lo que más influía no era la
pobreza sino la desigualdad. Explicó cómo todos nos hacemos cómplices de
un sistema inhumano, pues les consideramos enfermos, echando la culpa
al sujeto. Añadió que ya que están enfermos, el único recurso es la
medicación y dio un dato: “El consumo de tranquilizantes en cinco meses
se disparó el 10%”. Tras señalar que el punto extremo al que llega el
sujeto que se ha creído esto es el suicidio, denunció el que se intente
maquillar las cifras de suicidios, pues el suicidio tienen una
“dimensión política” y acabó empleando las palabras “genocidio
financiero”. Finalmente dijo que el rescate no se pide solo a las
instituciones y a los representantes, sino a la sociedad civil y, como
remate, afirmó: “La Plataforma de Afectados por la Hipoteca ha evitado
más suicidios que todos los antidepresivos juntos”.
El
pleno iba avanzando mientras el ambiente refrescaba y los asistentes se
ponían sus cazadoras o chaquetas. Las intervenciones eran seguidas de
aplausos o lemas voceados: “Sí se puede”, “Ningún ser humano es ilegal”,
“Nativa o extranjera la misma clase obrera”. Uno de los coordinadores
del acto dio las gracias a todos los que habían firmado a favor de la sanidad pública en la consulta popular realizada entre el 5 y el 10 de mayo.
Llegado el turno de un orador de Juventud Sin Futuro, el lenguaje fue
más directo y crudo. Primero, el joven expresó su gratitud al movimiento
vecinal “por ser los únicos que han mantenido la política democrática”
y, después, denunció la precariedad, “con salarios de mierda”. Mencionó a
los compañeros que esa misma tarde habían ido a hacer un escrache ante
la CEOE (¡Escrache al desempleo! ¡Escrache a la precariedad!);
a los integrantes de esa organización no les consideró verdaderos
empresarios y les calificó con palabras durísimas. Recordó que hay un
paro juvenil superior al 50% e indicó que solo quedaban tres salidas:
paro, exilio y precariedad. Empleaba la palabra “exilio” en lugar de
“inmigración”, pues según explicó, en el diccionario de la RAE se dice
que el “exilio” es el abandono por razones políticas. Hablando de la
precariedad, señaló que es un problema para los jóvenes no solo
económico, sino, también, existencial. Para terminar, el joven abogó por
generar una alternativa política desde abajo, pues “no
vale votar una vez cada cuatro años”. Después del enérgico y extremado
discurso del joven tomaron el micrófono los oradores de la PAH. Uno de
ellos, con gran sentido del humor, comentó las relaciones entre los
paraísos fiscales y la titulización hipotecaria, y se refirió a
banqueros y políticos como “los que armaron esta estafa”. Otra
interviniente lamentó que no
quisieran aprovechar la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) sobre
desahucios; pero añadió que iban a ir a por más: pretenden que los pisos
en manos de la banca pasen a la ciudadanía que vive en los albergues o
en la calle; y, además, quieren juicios y castigo para los culpables. A
propósito de esto, uno de los conductores del pleno anunció una nueva
convocatoria: para el 8 de junio la PAH está preparando una marcha
contra la “impunidad financiera”.
Las
últimas conferenciantes hablaron de los servicios sociales públicos
que, según explicaron, se vienen desarrollando desde hace unos treinta
años, desde la Constitución de 1978. Se pasó a tener servicios sociales
en lugar de beneficencia. Se denunció que los servicios sociales han
sufrido recortes aunque en el periodo de bonanza tampoco recibieron
mucho presupuesto. Explicaron que el Gobierno considera que los
servicios sociales no son su
responsabilidad al no haber ley estatal. Una de las oradoras aportó este
dato: en la Comunidad de Madrid el presupuesto para 2013 es un 6% menor
que el del año pasado; afecta al programa que financia la Red Básica de
Atención que, prácticamente, ha sido desmantelado; en 2010, cinco
millones y, ahora, menos de uno. Entre otros muchos temas se comentó la
tardanza en la valoración y en la concesión de las prestaciones, la
falta de refuerzo en las plantillas de trabajadores, la precariedad
energética de las familias que no tienen para pagar gas o electricidad, y
se propuso una casilla por la dignidad en la declaración de la renta.
Al acabar las exposiciones de los oradores se invitó a los asistentes a
intervenir. Representantes de algunas asociaciones aprovecharon para
anunciar próximas convocatorias de protestas en sus respectivos barrios.
Para finalizar el conductor del pleno reivindicó el orgullo de los
barrios y haciendo gala de ello voceó: “Yo soy de barrio”. Añadió:
“Queremos desarrollar proyectos”. El acto se cerró con El canto a la libertad de Labordeta coreado por los presentes.